Terapia con ultrasonido
Ultrasonido: El impulso que tu cuerpo necesita
El dúo perfecto para tu bienestar: Quiropráctica y ultrasonido.

Terapia Quiropráctica con Ultrasonido:
Una Combinación Potente para tu Salud
La terapia quiropráctica, conocida por sus ajustes manuales precisos para alinear la columna vertebral y las articulaciones, ha encontrado un aliado poderoso en el ultrasonido terapéutico. Esta combinación sinérgica ofrece un enfoque integral para el tratamiento de diversas afecciones musculoesqueléticas, brindando alivio del dolor y promoviendo la curación de manera más eficaz.
La quiropráctica se centra en corregir las subluxaciones vertebrales, aquellas pequeñas desalineaciones que pueden comprimir nervios y causar dolor o disfunción. Al realizar ajustes precisos, el quiropráctico restablece la movilidad articular y alivia la tensión en los tejidos. Por su parte, el ultrasonido terapéutico utiliza ondas sonoras de alta frecuencia para penetrar profundamente en los tejidos, generando calor y micro-masajes internos. Este calor terapéutico aumenta el flujo sanguíneo local, reduce la inflamación y acelera los procesos de reparación tisular.
¿Cómo funciona esta combinación?
El tratamiento suele comenzar con una evaluación detallada realizada por el quiropráctico. A través de pruebas ortopédicas y neurológicas, se identifica la causa del dolor y se determina el plan de tratamiento más adecuado. Una vez establecido el diagnóstico, el quiropráctico realizará los ajustes necesarios para corregir las subluxaciones vertebrales y restablecer la biomecánica articular.
Posteriormente, se aplica el ultrasonido terapéutico en las áreas específicas que requieren tratamiento. El terapeuta moverá el cabezal del dispositivo sobre la piel, aplicando un gel conductor para facilitar la transmisión de las ondas sonoras. El paciente puede sentir una sensación de calor y vibración suave durante el tratamiento.